Entre las opciones más utilizadas para garantizar la seguridad, la durabilidad y el buen funcionamiento de una instalación eléctrica se encuentran el tubo corrugado y el tubo flexible, dos soluciones prácticas con características específicas que las hacen ideales para distintos tipos de proyectos.
Si estás por realizar una instalación nueva o renovar una existente, conocer sus diferencias y ventajas te ayudará a elegir la opción más adecuada.
¿Qué es el tubo corrugado?
El tubo corrugado se caracteriza por su estructura ondulada o acanalada, fabricada generalmente en PVC o polietileno de alta densidad (PEAD).
Esta forma le otorga una excelente flexibilidad y resistencia al impacto, además de facilitar su instalación en muros, pisos y techos.
Es muy utilizado en instalaciones eléctricas empotradas o subterráneas, donde se requiere proteger el cableado de la humedad, el polvo o la compresión del concreto.
Además, su ligereza y bajo costo lo hacen una de las soluciones más populares tanto en proyectos residenciales como industriales.
¿Qué es el tubo flexible?
Por otro lado, el tubo flexible está diseñado para aplicaciones donde se necesita mayor movilidad o adaptabilidad.
Fabricado comúnmente con nylon o materiales metálicos flexibles, ofrece una estructura más resistente y duradera frente a condiciones extremas de temperatura, vibración o fricción.
Este tipo de tubo es ideal para maquinaria industrial, equipos eléctricos, tableros y cableado expuesto, ya que permite un fácil acceso al interior y soporta movimientos constantes sin deformarse ni romperse.
Principales diferencias entre tubo corrugado y tubo flexible
Aunque ambos tipos cumplen la misma función básica —proteger cables eléctricos—, sus propiedades varían en función del entorno de uso:
| Característica | Tubo corrugado | Tubo flexible |
| Material | PVC o PEAD. | Nylon o metal. |
| Flexibilidad | Alta, pero limitada al diseño ondulado. | Muy alta, se adapta a curvas pronunciadas. |
| Resistencia mecánica | Buena para uso empotrado. | Excelente para ambientes industriales. |
| Resistencia a temperatura | Moderada. | Alta, soporta calor y frío extremos. |
| Aplicación | Instalaciones ocultas o fijas. | Instalaciones expuestas o con movimiento. |
¿Cuál elegir para tu instalación eléctrica?
La elección depende principalmente del tipo de instalación y el entorno de trabajo:
- Tubo corrugado: Ideal para viviendas, oficinas o proyectos donde el cableado se empotra en muros, techos o pisos. Es económico, fácil de instalar y protege eficazmente contra la humedad y el polvo.
- Tubo flexible: Recomendado para instalaciones industriales o de alto rendimiento, donde el cableado debe resistir vibraciones, calor o exposición directa. También es la mejor opción cuando se requiere mantenimiento frecuente o cambios en el sistema eléctrico.
En Equalo tenemos disponible una amplia gama de tubos de protección para el cableado.
Tanto el tubo corrugado como el tubo flexible ofrecen soluciones confiables y seguras para la conducción eléctrica.
La clave está en elegir el que mejor se adapte a las condiciones del entorno y al nivel de exigencia del proyecto.
Si buscas una alternativa económica y práctica, el tubo corrugado es una excelente opción.
Pero si tu prioridad es la resistencia, durabilidad y facilidad de mantenimiento, el tubo flexible es la mejor elección.
Ambos tipos de tubos garantizan la protección y eficiencia de tu instalación eléctrica, siempre que se seleccionen con base en las necesidades técnicas y las normas de seguridad correspondientes.
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